10 cosas que hacer antes de los 30

Buffff, cada vez veo más cerca lo de llegar a 30 años. No hay vuelta atrás, momento de ser responsable, de empezar a pensar en familia, en no salir tanto porque luego te pasas el día siguiente con una cara de como si te hubieran pegado la noche anterior.

Antes de que llegue eso, a mi me quedan un par de añitos todavía, hay una serie de cosas que deberían ser obligatorias de hacer, la típica lista que te haces en tu cabeza y que o las haces ahora, o luego va a ser demasiado tarde....

Tirarse en paracaídas o hacer puenting: yo me quedo con la primera claramente, lo de que me aten una cuerda a los pies me da mal rollo, pero lo de tirarse desde un avión, lo veo más asequible. Llevas dos paracaídas y además siempre te tiras con un tío que lo ha hecho mil veces. Tengo que hacerlo ya. La sensación de estar bajando tiene que ser indescriptible.

Hacerse el Camino de Santiago: siempre lo he tenido en la cabeza. Lo de andar tampoco me encanta, pero hacerselo en bici, o en coche en plan vago tiene que ser igual de guay. Creo que a veces se nos olvida que España tiene mil sitios espectaculares, por eso quiero coger un día y hacerme una semana de caminatas con mochila de 50 kilos, con buena compañía para llegar a Santiago y hacerme un buena ruta por los bares de la ciudad con la conciencia tranquila.

Colgar un cuadro: soy lamentable, lo reconozco, no se montar cuadros, lo máximo unas sillas de IKEA con mi amigo Borja que tarde 2 horas. Soy cero manitas y eso tiene que cambiar. Ahora porque vivo con colegas, pero el día que viva sólo, mi casa a este paso, solo va a tener posters...

Hacerme una carrera de 10 kilómetros: todo el mundo corre y es tema de conversación constante con mis colegas. A la próxima carrera que haya y que alguien me líe me la voy a correr. Y punto. Ruego desde aquí, que no sea muy pronto, que tengo 2 años para hacerla.

Ir a Nueva York: no he estado y la tengo en mi lista bien arriba, porque no hay ciudad en el mundo que me apetezca más ir. Todavía no conozco a nadie que no haya vuelto alucinando con la ciudad. Pasear por Times Square, tomarme un perrito callejero, subir al Empire State o ir en barco por el Hudson me apetece todo. Voy el año que viene como sea.

Aprender a escribir con pluma: el otro día me dieron una y quede de tonto porque no sabía escribir con ella. Creo que es la típica cosa que tiene que ser fácil y nunca lo hago. En verdad, tampoco tengo una pluma...


Aprender a hacer cocido madrileño: mi plato favorito y no lo sé hacer, es verdad que me sale muy bueno el de Litoral, pero es que mi madre algún día se cansará de hacerlos y yo no me quedo los domingos sin tomar cocido. La sopa esa espesa, cuando hace en Madrid 5 grados es para llorar, el revuelto de carne, el repollo...no tiene que ser tan complicado.

Empezar a desayunar por las mañanas. Lo de tomarse 3 cafés de buena mañana no es desayunar, me da mucha envidia la gente que se levanta por la mañana y se toma su zumo, su café, su barrita con tomate y hasta fruta. Llego a la comida muriendo. Momentazo incomodo de que te suene la tripa en el curro a la 1, y la gente levante la cabeza y te miren en plan, tomate unas galletas anda....

Ver la peli Casablanca: no la he visto nunca, me parece mal, obra de arte del cine y me dedico a ver antes la última de Denzel Washington (que también mola). Me lo he propuesto, palomitas de esas con mantequilla, cocacola de 2 litros y a ver porque se la considera una de las mejores pelis de la historia. Siempre nos quedará Paris.

Meter un gol de chilena: esto va a ser difícil, pero por eso molan tanto los sueños. el otro día soñé que metía uno de tijera, y no me quiero quedar sin meter uno de chilena. Tengo lentillas y me cago cuando tengo que intentarlo. Yo creo que es porque todavía nadie me ha puesto el balón perfecto...también se vive de excusas.

Alguna que se os ocurra a vosotros?? Encantadísimo de ver vuestros comentarios.

Si el hombre alcanzara la mitad de sus deseos, redoblaría sus inquietudes.
Benjamin Franklin.