Ni tanto hace cuando el mundo giraba en torno al último capitulo de Oliver y Benji y de si el bocadillo que te iba a traer tu madre al salir del cole iba a ser de chorizo o de salchichón...
Pues sí, de vez en cuando me acuerdo lo feliz que era siendo un enano, teniendo cero preocupaciones y sólo centrándonos en disfrutar con los amigos y en no ser elegido el último jugando al fútbol.
Las listas, son fáciles de leer así que no encuentro otra manera de recordar algunos de las mejores historias de ser PEQUEÑO.
1. Justo empiezo por el fútbol, pero el del patio del recreo, no el fútbol de la tele. Las 11.25 de la mañana y tu nervioso porque termine la clase. Bajar las escaleras como si dieran Big Macs gratis y te plantabas en el campo de fútbol. El que llevaba el balón, era visto como un semidios, y al que elegían el ultimo era considerado un paria (pero de buen rollo). Mil bolas en el mismo campo, 5 porteros en cada portería y todo el mundo sabía en que equipo jugaba. y que desde luego no había árbitro. No sólo eran los partidos, eran las elimis, eran los culés, eras feliz! hasta que llegaban los mayores, y te mandaban la bola a Cuenca. El gasto en rodilleras de tu madre haría subir ahora 2 puntos el PIB.
2. Los Tazos: que maravilla de juego, el que inventó los Tazos debería tener un premio Nobel. Que juego más simple y cuanta gente enganchada jugando en la calle, y no en su casa jugando a la SuperNintendo. Tampoco me voy a echar flores pero es que era cojonudo jugando, todavía tengo una caja de zapatos, llena de de Supertazos, Megatazos y Macrotazos....porque luego llegaron los Caps, y los Rappers que desde luego eran lamentables. Además, el creador colaboró activamente en que Matutano dejara las lenguas naranjas de millones de niños españoles, porque los tazos no se compraban, los regalaban con las bolsas de Cheetos. Que mente más privilegiada, joder. Te echo una, primer!
3. Las Mamachichos: programa de Telecinco espectacular, no me acuerdo muy bien, sólo sé que mi familia se encarga de recordarme de vez en cuando, que me quedaba mirando la tele anonadado (ahora entiendo porque llevo gafas...). Grupo de mujeres, en bikini y falda caribeña, que contribuyó a que los niños españoles empezaran a interesarse por las chicas desde bien prontito. Mamachicho me toca, me toca cada vez más....
4. La enfermería: un aplauso para el primer garito que hemos visitado en nuestra vida. La enfermería era lugar de reunión, lugar de colegueo con tus amigos durante las clases y excusa perfecta para perderte Mates a las 10 de la mañana que no era precisamente tu asignatura favorita. El segundo antes de mentir a tu profesor diciéndole que te dolía la tripa sabías que te iba a merecer la pena, porque había quedado con tu amigo en 5 minutos.La enfermera, siempre estaba de colegueo y tenía más claro que tú, que no te pasaba nada, así que te daba una pastilla para el dolor de tripa que sabía a fresa, y te mandaba a clase rapidito.
5. La merienda. vaya inventazo para montar entre dos comidas, otra comida más en la que no había muchas reglas establecidas. Bocadillo de nocilla (mucho mejor que la Nutella) que te hacía recuperarte después de un dia entero de enfermerías, digo de clases. Bolsita de Bocabits o de pandilla Drakis. Colacao tremendo, de esos que no se disolvía en la vida y que te hacían toser sin parar. Donuts industriales, cañas de chocolate o bollicaos que eras la envidia de tus amigos. Bolsas de golosinas de esas de 100 pesetas con melones, cocacolas y Petazetas. Bolsas de gusanitos y de Tostitos. Si sigo hago un post nuevo. Nadie tenía el colesterol por las nubes, como mucho algun gordito. Ahora tenemos que mirar que todo lo que comas sea sano. Me niego!!
6. Los dibujos del fin de semana: vaya madrugones te pegabas el fin de semana, si lo piensas, a las horas a las que llegamos ahora los findes....no tenías ni que ponerte alarma, Ahí estabas tu delante de la tele con tu colacao, viendo tu serie favorita. Tus padres descansaban en esos momentos, porque las series de antes no eran violentas, como mucho Vegeta, que era un poco chungo. Eran 3 horas del fin de semana en los que tus padres podían realmente tener fin de semana. Los campos de Oliver y Benji interminables y Bola de dragón siempre han sido mis favoritas. Perderte un capítulo te hacía estar desconectadísimo de tus amigos al día siguiente. Eras un bicho raro.
7. Los cumpleaños en el Burger. Buffff vaya sitiazo para invitar a tus amigos. No había mas alegría recibir una invitación de tu amigo que hacía su cumple el próximo viernes en el Burger King. Obviamente no todo eran hamburguesas, tu madre se encargaba de hacer mediasnoches de chorizo con mantequilla (nunca he entendido lo de la mantequilla) para darle un toque mas español al asunto. No podían faltar la mezcla del más guay de tus amigos de cococola y fanta de naranja, ahora ni te lo planteas, pero eran los primeros pasos para las mezclas de copas que te haces ahora....La piñata tampoco faltaba, ese momento en el que eras el rey y veías a tus amigos las caras esperando a romperla....perdón el rey no eres, hasta que te ponían la corona del Burger :)
8. La Cabalgata de Reyes. Un respeto, reconozco que si estoy en Madrid no me la pierdo ni de coña, iría antes que al Bernabéu. En otros países la Navidad ya había terminado pero para ti era el día más importante. Tengo que decir que soy poco fan de Papa Noel, aunque trajera los regalos antes...no sé, no me daba buena espina. Ir a la Castellana el día 5 e ir a ver a Gaspar sólo era comparable a cuando te ponían la corona del Burger. todavía veo las caras de los niños y me dan ganas de volver a tener 7 años. Levantarte a las 3 de la mañana y ver los regalos y no abrirlos, era la tortura más grande que podías soportar. Ahora, que por la mañana abriéndolos hacía que la espera mereciera la pena.
Que ganas de volver por unos días a ser pequeño. Ahora te das cuenta que esos siempre fueron los mejores momentos de tu vida. Nivel de preocupación = 0. Nivel de Felicidad = 10.
Puños fuera!!
"He nacido siendo un niño, y moriré siendo tal". Anónimo
Pues sí, de vez en cuando me acuerdo lo feliz que era siendo un enano, teniendo cero preocupaciones y sólo centrándonos en disfrutar con los amigos y en no ser elegido el último jugando al fútbol.
Las listas, son fáciles de leer así que no encuentro otra manera de recordar algunos de las mejores historias de ser PEQUEÑO.
1. Justo empiezo por el fútbol, pero el del patio del recreo, no el fútbol de la tele. Las 11.25 de la mañana y tu nervioso porque termine la clase. Bajar las escaleras como si dieran Big Macs gratis y te plantabas en el campo de fútbol. El que llevaba el balón, era visto como un semidios, y al que elegían el ultimo era considerado un paria (pero de buen rollo). Mil bolas en el mismo campo, 5 porteros en cada portería y todo el mundo sabía en que equipo jugaba. y que desde luego no había árbitro. No sólo eran los partidos, eran las elimis, eran los culés, eras feliz! hasta que llegaban los mayores, y te mandaban la bola a Cuenca. El gasto en rodilleras de tu madre haría subir ahora 2 puntos el PIB.
2. Los Tazos: que maravilla de juego, el que inventó los Tazos debería tener un premio Nobel. Que juego más simple y cuanta gente enganchada jugando en la calle, y no en su casa jugando a la SuperNintendo. Tampoco me voy a echar flores pero es que era cojonudo jugando, todavía tengo una caja de zapatos, llena de de Supertazos, Megatazos y Macrotazos....porque luego llegaron los Caps, y los Rappers que desde luego eran lamentables. Además, el creador colaboró activamente en que Matutano dejara las lenguas naranjas de millones de niños españoles, porque los tazos no se compraban, los regalaban con las bolsas de Cheetos. Que mente más privilegiada, joder. Te echo una, primer!
3. Las Mamachichos: programa de Telecinco espectacular, no me acuerdo muy bien, sólo sé que mi familia se encarga de recordarme de vez en cuando, que me quedaba mirando la tele anonadado (ahora entiendo porque llevo gafas...). Grupo de mujeres, en bikini y falda caribeña, que contribuyó a que los niños españoles empezaran a interesarse por las chicas desde bien prontito. Mamachicho me toca, me toca cada vez más....
4. La enfermería: un aplauso para el primer garito que hemos visitado en nuestra vida. La enfermería era lugar de reunión, lugar de colegueo con tus amigos durante las clases y excusa perfecta para perderte Mates a las 10 de la mañana que no era precisamente tu asignatura favorita. El segundo antes de mentir a tu profesor diciéndole que te dolía la tripa sabías que te iba a merecer la pena, porque había quedado con tu amigo en 5 minutos.La enfermera, siempre estaba de colegueo y tenía más claro que tú, que no te pasaba nada, así que te daba una pastilla para el dolor de tripa que sabía a fresa, y te mandaba a clase rapidito.
5. La merienda. vaya inventazo para montar entre dos comidas, otra comida más en la que no había muchas reglas establecidas. Bocadillo de nocilla (mucho mejor que la Nutella) que te hacía recuperarte después de un dia entero de enfermerías, digo de clases. Bolsita de Bocabits o de pandilla Drakis. Colacao tremendo, de esos que no se disolvía en la vida y que te hacían toser sin parar. Donuts industriales, cañas de chocolate o bollicaos que eras la envidia de tus amigos. Bolsas de golosinas de esas de 100 pesetas con melones, cocacolas y Petazetas. Bolsas de gusanitos y de Tostitos. Si sigo hago un post nuevo. Nadie tenía el colesterol por las nubes, como mucho algun gordito. Ahora tenemos que mirar que todo lo que comas sea sano. Me niego!!
7. Los cumpleaños en el Burger. Buffff vaya sitiazo para invitar a tus amigos. No había mas alegría recibir una invitación de tu amigo que hacía su cumple el próximo viernes en el Burger King. Obviamente no todo eran hamburguesas, tu madre se encargaba de hacer mediasnoches de chorizo con mantequilla (nunca he entendido lo de la mantequilla) para darle un toque mas español al asunto. No podían faltar la mezcla del más guay de tus amigos de cococola y fanta de naranja, ahora ni te lo planteas, pero eran los primeros pasos para las mezclas de copas que te haces ahora....La piñata tampoco faltaba, ese momento en el que eras el rey y veías a tus amigos las caras esperando a romperla....perdón el rey no eres, hasta que te ponían la corona del Burger :)
Que ganas de volver por unos días a ser pequeño. Ahora te das cuenta que esos siempre fueron los mejores momentos de tu vida. Nivel de preocupación = 0. Nivel de Felicidad = 10.
Puños fuera!!
"He nacido siendo un niño, y moriré siendo tal". Anónimo
taaaaaaan cierto!! que buenos recuerdos Javi!!!
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